En el corazón de la región de Île-de-France en Francia, se alza con imponencia el Palacio Vaux le Vicomte, una joya arquitectónica que ha cautivado a visitantes y amantes del arte a lo largo de los siglos. Este magnífico palacio, construido en el siglo XVII, no solo sirve como un testimonio de la opulencia de la época, sino que también es un hito que marcó un punto de inflexión en la historia de la arquitectura y el diseño paisajístico.
Historia del Palacio Vaux le Vicomte
¿Sabías que el Palacio Vaux le Vicomte es uno de los lugares más chulos de Francia? Este palacete, que parece sacado de un cuento de hadas, tiene una historia fascinante. Fue construido en el siglo XVII, durante el reinado de Luis XIV, y fue la casa de Nicolas Fouquet, el superintendente de finanzas del Rey Sol. Imagínate vivir ahí, ¿eh?
Pero ojo, porque la vida de Fouquet no fue precisamente un camino de rosas. Resulta que el rey Luis XIV se puso celoso de su palacio (que era mucho más guay que el suyo) y decidió meterle en prisión. ¡Menudo drama! Así que el pobre Fouquet pasó de vivir en un palacete a pasar el resto de su vida entre rejas. Total, que a partir de ahí el palacio pasó por las manos de varias familias hasta llegar a nuestros días.
Cómo se construyó
La construcción del Palacio Vaux le Vicomte fue todo un hito en su época. No se trataba solo de levantar un edificio bonito, sino de crear una obra de arte total, donde la arquitectura, la decoración y el jardín formaran un conjunto armonioso. Este concepto, que hoy nos parece de lo más normal, en aquel entonces fue toda una revolución. Para llevarlo a cabo, Fouquet contrató a los mejores: al arquitecto Louis Le Vau, al pintor Charles Le Brun y al jardinero André Le Nôtre.
Estos tres genios se pusieron manos a la obra y lo dieron todo para crear el palacio más impresionante de la época. Y vaya si lo consiguieron. El resultado fue un edificio de una belleza espectacular, que dejó a todo el mundo con la boca abierta. Pero no solo eso, sino que además sentó las bases para el estilo que se seguiría en la construcción del Palacio de Versalles. Vamos, que estos tres no eran mancos.
Los Jardines de Le Nôtre
Los jardines a la francesa diseñados por André Le Nôtre son otra maravilla que complementa la estructura del palacio. Los parterres geométricos, las fuentes ornamentales y los caminos perfectamente trazados crean una armonía visual que sigue siendo un modelo para diseñadores de jardines hasta el día de hoy.
Cómo visitar Palacio Vaux le Vicomte
Si te has quedado con ganas de ver este palacete tan chulo, la buena noticia es que hoy en día se puede visitar. Se encuentra en la región de Île-de-France, a unos 50 kilómetros al sureste de París. Para llegar, puedes coger un tren desde la estación de París-Est hasta la estación de Melun, y desde allí un shuttle te llevará directamente al palacio. Eso sí, ten en cuenta que el palacio solo abre de abril a noviembre, así que mejor planea tu visita con tiempo.
Una vez allí, puedes visitar el palacio, los jardines y el museo de carruajes. Y si eres de los que se quedan con ganas de más, incluso puedes disfrutar de una cena a la luz de las velas en el palacio. ¡Menuda pasada! Ah, y un último consejo: no te pierdas la vista desde la cúpula del palacio. Dicen que es la mejor de toda Francia. ¡Ya me contarás!