Visitar la Sagrada Familia de Barcelona equivale a disfrutar de su monumento más importante y llamativo pues esta notable muestra de arquitectura llama la atención del mundo por ser la obra que más tiempo se ha tardado en construir, pues recordemos que aún no se encuentra terminada y que la fecha estimada para ello corresponde al año 2026.
Con la garantía de ser edificada siguiendo los planos que dejó el arquitecto Gaudí, la inquietud respecto a la mejor manera de ver la sagrada familia se mantiene incluso con el pasar del tiempo ya que es un lugar demasiado apasionante que demanda una buena organización al momento de hacer presencia para aprovecharlo verdaderamente.
Consejos para ver la Sagrada Familia de Barcelona
Si la idea es facilitar las cosas al máximo, lo más adecuado es empezar por encontrar un alojamiento cercano al monumento, en cuanto a esto es adecuado saber que el barrio que le rodea se encuentra muy bien equipado para ofrecer este tipo de servicios.
Ahora bien, cuando la idea es sacar todo el provecho posible lo mejor es comprar los boletos de entrada a través de la página web oficial de la Sagrada Familia. Esto te permitirá ahorrarte una fila interminable, además de que puedas elegir tanto el día como la hora para tu ingreso ya estos detalles están excesivamente regulados.
Asegúrate de que tu entrada incluya el acceso a las torres, pues en el momento ya se encuentran 8 disponibles. Para acceder a estas se encuentra disponible un ascensor, el cual establece que los menores de 6 años no pueden ingresar a estas.
Te sugerimos optar por el uso de audioguias o en su lugar a una visita guiada por la sagrada familia ya que solo de esta manera tendrás acceso a miles de detalles que por ti mismo no descubrirás.
Una visita guiada a la Sagrada Familia
Los tours se realizan tanto en español como en otros idiomas, en estas visitas se suele manejar un itinerario que incluye recorridos por las diferentes fachadas y por supuesto por el interior, a la vista se encuentran algunos planos y maquetas que te darán una idea de lo que aún falta por ver en esta exuberante obra arquitectónica.
Recorrer este símbolo de Barcelona incluyendo las torres puede tardar unas dos horas, así que se recomienda elegir los días soleados para estar un poco más cómodos en cuanto a clima y de paso visualizar mucho mejor cada aspecto.
Evidentemente el tema de las largas filas es lo que más pone en duda a una persona para decidirse a planear su visita, pero la verdad es que es un tesoro de la humanidad de carácter mucho más que religioso pues reúne la visión de un grande de la arquitectura que afortunadamente pudo dejar plasmada su propuesta para que otras generaciones lograrán hacer el sueño una realidad tangible. Adicionalmente muchos suelen quejarse por el alto precio de las entradas, pero recordemos que buena parte de este dinero se asume como donación para poder continuar con los trabajos de construcción.